Los días 7 al 9 de julio de 2023 la Plaza Manuel Ibáñez de Colombres será como siempre el epicentro de este festival cultural en el que se incluirán diferentes actos como el mercado indiano, música en directo, encuentros de habaneras, conferencias, exposiciones… Este evento recibió la declaración como Fiesta de Interés Turístico del Principado de Asturias el pasado 23 de diciembre de 2021.

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¿Qué es la Feria de Indianos?

Desde el año 2008 el Ayuntamiento de Ribadedeva, conjuntamente con las asociaciones locales, ha liderado el proyecto de organización de una feria cultural dedicada a Hispanoamérica con el fin de celebrar la importante aportación de la cultura de sus naciones a la cultura, economía, sociedad y costumbres de nuestro municipio y nuestra región. Este hecho no es gratuito, tiene una explicación que ahonda en el pasado de nuestro pueblo. Nuestra tierra es una zona de amplia emigración a dichos países durante finales del siglo XIX y principios del XX, lo que atestiguan las numerosas casonas edificadas por los llamados «Indianos» (los que volvían con importantes fortunas) en todo el territorio. Todo este patrimonio arquitectónico ha sido declarado Bien de Interés Cultural como Conjunto Histórico en el año 2013. Una de esas casonas situada en Colombres es hoy el Archivo de Indianos-Museo de la Emigración, un claro exponente de lo hondo que caló dicho fenómeno social y cultural en nuestros territorios. Desde hace algunos años decidimos dedicar la feria a un país hispanoamericano en cada edición, por lo que la actividad cultural se centra un poco más en su cultura y tradiciones.

La Plaza Manuel Ibáñez de Colombres y sus alrededores, enclave de significante vinculación indiana, se convierten en un auténtico mercado con género y mercancías de ultramar que conviven con los productos de la artesanía y la gastronomía de nuestra región. Al mismo tiempo que se celebra el mercado, se programan actos diversos, exposiciones, proyecciones, visitas guiadas, actuaciones musicales, talleres, que acerquen culturalmente al asistente a la figura y legado de los indianos.

Las calles de la villa se engalanan con una decoración de marcado carácter colonial a lo que se suma la ambientación de las paradas y de los mercaderes que van ataviados con atuendos acordes para la ocasión. Lo mismo ocurre con la animación de calle, que consiste en pequeñas representaciones de agrupaciones teatrales, y que hacen continua referencia a la temática de la feria. De la misma manera que las actuaciones musicales que incluyen conciertos con raíces latinas o encuentros corales al son de las habaneras.

También se programan visitas guiadas a diferentes hitos del legado indiano del municipio como la “Casa de Piedra” o el Archivo de Indianos, que ofrecerán al visitante las claves del hecho migratorio americano que afectó a nuestro territorio y las consecuencias más visibles que este fenómeno produjo en el mismo. Además, un tren turístico ofrece una ruta por las casonas de indianos más significativas a la vez que un guía proporciona información para desentrañar los aspectos históricos y constructivos de estas singulares edificaciones.

Esta iniciativa no pretende ser únicamente una importante cita comercial en nuestro municipio, se trata al mismo tiempo de un reencuentro del mismo con su historia más cercana. Supone, por tanto, reivindicar y poner en valor nuestro pasado. Y esto no podría ocurrir sin la intervención de los vecinos de Ribadedeva, cuya implicación es vital para el éxito del proyecto. Ellos son los encargados de llevar a las calles el espíritu de la feria, decorándolas, disfrazándose, saliendo de sus casas, disfrutando y siendo cómplices de una celebración de todos.

También tendrán un hueco importante algunos artesanos locales que, sin deseos ni expectativas comerciales, dedican su tiempo libre al trabajo de diferentes materiales, como la madera o la cerámica. Éstos tendrán la oportunidad de exhibir sus trabajos en la feria reivindicando un hacer y una tradición que remontan tiempo atrás las memorias de todos.

La Feria de Indianos de Ribadedeva se configura pues como un esfuerzo colectivo en el que administración, artesanos, feriantes, empresariado local y ciudadanía serán piezas de un mismo engranaje que habrá de desempolvar por unas horas el “indianu” que todos llevamos dentro.